En los últimos años –y sobre todo en estos meses–, el importe de la tarifa eléctrica ha aumentado notablemente y esto ha hecho que los usuarios se replanteen el tipo de iluminación que quieren instalar en su residencia para reducir los gastos y, además, realizar un uso responsable del del servicio.
Una de las alternativas, tal vez, la de mayor tendencia y accesibilidad económica es la iluminación Led (light-emitting diode: diodo emisor de luz) que cubre con creces las necesidades de ahorro energético en el hogar, ya que hay que tener en cuenta que alrededor de 25% de la energía que se consume allí va destinada a la iluminación.
Además, muchos mendocinos están apelando a la instalación de paneles solares, algo que también está en alza y que sólo tres provincias en el país cuentan con regulación para hacerlo, entre ellas, Mendoza.
Del bajo consumo al Led
Hace unos años, cuando los focos incandescentes eran mayoría, costó mucho que la sociedad tomara conciencia de la importancia de su reemplazo por los de bajo consumo. El motivo, en ese entonces, era alcanzar un mejor aprovechamiento de energía en los hogares y su consiguiente ahorro en la factura eléctrica. Finalmente, luego de los resultados alcanzados, los usuarios accedieron a dichas lámparas y hoy la mayoría de los hogares cuenta con ese tipo de iluminación.
Pero, como el paso del tiempo, la tecnología avanza velozmente y hoy la tendencia es otra.Muchos mendocinos ya están modificando las luminarias de sus hogares. Uno de los mayores motivos es por el incremento de la tarifa eléctrica en los últimos meses, lo que llevó a no sólo reducir el consumo, sino también buscar nuevas alternativas, entre ellas, las lámparas de Led que permiten un ahorro de hasta 50%.
Iluminar los hogares con Led era para algunos, los de mayor poder adquisitivo; hoy es una tendencia en alza por la accesibilidad a las bombillas. Las mismas tienen un costo que va desde los 75 pesos y para su colocación no se necesita realizar cambios en la instalación eléctrica, lo que facilita aún más la decisión de pasar del bajo consumo a esta tecnología que, incluso, ya se está aplicando en las luminarias del alumbrado público de varios municipios del Gran Mendoza.
“Además del ahorro energético, una de las ventajas que presenta el Led es el grado de luminosidad, respecto a las de bajo consumo, lo que permite reducir la cantidad de lámparas que se deben utilizar a la hora de iluminar un ambiente. Otros de los beneficios es que ahorra 50 veces más que las incandescentes y 10 veces más que las de bajo consumo. Entonces está claro que son una gran inversión”, aseguró Enrique García, propietario de OCG Luminarias.
Otra de las ventajas es la durabilidad de las mismas, algo que los usuarios analizan mucho a la hora de adquirir o no las lámparas: “Es muy beneficioso comprar Led ya que una de esas bombillas dura lo mismo que 50 incandescentes o 10 de bajo consumo, lo que implica un ahorro importante para la economía del hogar”, expresó el comerciante.
Muchos son los factores que inducen a los usuarios a renovar la iluminación de sus hogares y eso se ha notado en las comercios donde se expenden las lámparas ya que la gente no consulta por ventajas y beneficios sino que directamente va dispuesta a comprar las bombillas. “No existe diferencia en el precio entre una lámpara Led y una de bajo consumo y los beneficios son superiores. Todos los rincones del hogar pueden ser iluminados con led, incluso, la misma heladera”, refirió García.
Paneles solares, una alternativa regulada
Otra opción para abaratar gastos de luz, es la colocación de paneles solares que pueden ser instalados en cualquier casa, industria o comercio de toda la provincia y su ahorro es modular que puede ir del 10 al 100%.
En el 2015, el EPRE aprobó una resolución que permitió que Mendoza se convirtiera en la tercera provincia argentina que regula la generación distribuida. “La resolucion permite que cualquier usuario del servicio (comercial, industrial, residencial, entre otras categorías) pueda instalar un aprovechamiento de energía fotovoltaica, eólica, mini hidráhulica, o sea, cualquier energía renovable; pueda autogenerar su propia energía y lo que le sobra pueda volcarlo a la red eléctrica”, expresó Ángel Garay, representante de la Gerencia Técnica de la Regulación del EPRE.
“A partir de la regulación 19, el EPRE obliga a las distribuidoras (Edemsa, EDESTE y cooperativas eléctricas) a comprar esa energía y a cambio le genera un crédito al usuario. La normativa contempla un procedimiento que se inicia cuando un usuario interesado se dirige a la oficina comercial de la Empresa Distribuidora que le suministra el servicio eléctrico y tramita allí una solicitud de estudio técnico para conectar su equipamiento de generación a la red pública de distribución. Luego de realizar la empresa distribuidora el correspondiente estudio técnico para evaluar la factibilidad del proyecto presentado, suscribirá un contrato de conexión con el usuario/generador, todo ello bajo el debido control y fiscalización del EPRE.
La instalación de paneles en la residencia se logra en dos días y tiene un costo de 100 mil pesos.“Son equipos silenciosos, no necesitan ningún tipo de mantenimiento y poseen una vida útil de 25 años”, refirió Alexis Atem, propietario de la empresa Energe, empresa maipucina desarrolladora de tecnología energética asociada con Longvie, una fábrica de radiadores de la región de Cuyo.
Alternativas para reducir los costos de luz y hacer un uso racional de la energía existen, solo depende de uno el método que puede y quiere utilizar. Hasta el momento, los mencionados, marcan tendencia en la provincia.
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