La presentación del libro 'Museos de la Provincia de Alicante' sirvió también cono acto de inauguración de la nueva iluminación de las salas permanentes del Museo Arqueológico Provincial de Alicante (Marq). Este cambio de puntos de luz, que ha requerido de una inversión de 214.000 euros, supondrá un ahorro de 48.000 euros al año en la factura de la luz del centro museístico.
Esta medida, llevada a cabo por Josep Soliveres y Jorge Sempere junto los jefes de sala Manuel Olcina, Jorge Soler y Rafael Azuar, no sólo será una mejora económica, ya que en menos cinco años estará amortizada y ya supondrá beneficios, sino que «mejorará la luz de la exposición en respuesta a una de las sugerencias que nos hacían nuestros visitantes en las encuestas de valoración, que no pedían menos oscuridad», indicó Manuel Olcina, director técnico del Marq.
Otro de los motivos que respaldan esta iniciativa es una conservación más estable de la temperatura de las salas permanentes del museo. Para explicar tal efecto, Olcina mostró a los presentes una serie de gráficas donde se observaba una oscilación térmica, desde la colocación de la iluminación led, casi inexistente. «Antes teníamos una variación de tres grados y con esta luz desaparece. Esto ayuda a la mejor conservación de las piezas y, al tiempo, a ahorrar en aire acondicionado o calefacción», detalló.
Este menor consumo de luz, que se traduce en una reducción de más del 90 por ciento de los kilovatios contratados, repercutirá a su vez en la contaminación, ya que la emisión de CO2 a la atmósfera pasará de 221 a seis toneladas por año.
Además, con el paso de los años el valor de esta inversión se verá incrementado por la reducción en el gasto de mantenimiento. Mientras que las bombillas de la anterior iluminación de las salas permanentes del Marq tenían una vida de consumo de entre cuatro y cinco mil horas, los nuevos puntos de luz llegan a entre diez y quince mil horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario