Te presentamos al primer tipo de cemento que es capaz de absorber la energía del sol y no sólo eso, en la noche, es capaz de alumbrar edificios y calles.
Orgullosamente mexicano, este cemento denominado fosforescente podría ponerle un final rotundo a la iluminación en las calles.
Creado por José Carlos Rubio Ávalos, de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), este cemento mágico absorbe la energía solar, devolviéndola al medioambiente, se trata de un cemento que emite luz por al menos 12 horas durante la noche, es ecológico y puede servir hasta 100 años.
Este cemento fosforescente podrá ser utilizado en cualquier sitio e iluminar vías, carreteras, edificios y otros objetos sin requerir energía eléctrica, lo que significaría un respiro a nuestro planeta.
“Otra ventaja es que por los componentes materiales (arena, tierra o arcilla) es fácilmente reciclable, lo que hace que el impacto ambiental sea mucho menor”, sostuvo Rubio Ávalos en una entrevista al portal Verne, del diario El País.
El ingeniero mostró interés en materiales fosforescentes desde hace alguno años -2008-, cuando trabajaba para una empresa mexicana que fabricaba señalamiento vial.
Modificar la microestructura del cemento resultó todo un reto, ya que, según explica el investigador, “es un material opaco” que “no permite el paso de luz”.
Actualmente se llevan a cabo trámites de propiedad intelectual y es posible que este año la tecnología del ingeniero mexicano aparezca en el sector productivo.
No obstante, el nuevo cemento fosforescente será bastante más caro que el cemento normal, pero vale la pena ¿no lo crees?
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