El fabricante de luminarias General Electric (GE) anunció al mercado estadounidense que dejará de producir Fluorescentes Compactos (CFL) a finales de 2016, para concentrarse en la tecnología LED y en el desarrollo de la conectividad de los hogares.
El costo de su energía, su largo tiempo de vida y su capacidad de conectividad han puesto al LED en una trayectoria ascendente, mientras que se espera que la espiral de CFL disminuya en los próximos años. Por ello, GE espera aprovechar el cambio del mercado hacia bombillas más inteligentes y para anunciar su estrategia el equipo de marketing redactó una carta de rompimiento diciéndole adiós al CFL.
Al día de hoy, en Estados Unidos, 15% de los consumidores han probado la tecnología LED; para el 2020 más del 50% de los sockets en las casas estadounidenses serán LED. Además, el precio del LED se ha reducido dramáticamente en los últimos 5 años, hasta hacerse comparable con el del CFL.
Los LEDs hacen de los hogares lugares más intuitivos para los habitantes y simplifican cómo es que la gente se comunica con sus hogares gracias a su conectividad y a sus “capacidades inteligentes”. Así, los consumidores pueden ahorrar en sus costos energéticos, personalizar sus experiencias al regular la luz o al prender y apagar de forma remota; además de lograr una mayor versatilidad en la elección del accesorio de iluminación.
La decisión de GE se realiza casi al mismo tiempo de la publicación de la nueva especificación Energy Star que eleva el nivel de lúmenes por watt de eficiencia para la industria de la iluminación; especificación para la que tal vez no califiquen las bombillas CFL en 2017.
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