Estudios demuestran que existe una relación entre el nivel de confort visual y la productividad, y que el control de la iluminación impacta en la productividad de los trabajadores en hasta un 5%.
25 de Septiembre de 2013
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Las soluciones en iluminación bien implementadas pueden aportar aumentos significativos en la productividad y la seguridad de los trabajadores en edificios comerciales así como contribuir a una reducción de hasta 60% en los gastos de energía. Estudios demuestran que existe una relación directa entre el nivel de confort visual y la productividad, y que el control de la iluminación impacta en la productividad de los trabajadores en hasta un 5%.
Tomando en cuenta que una de las inversiones más altas de una empresa es en el área de recursos humanos; un incremento en la productividad, por más pequeño que este sea, puede transformarse en un factor importante para el éxito de sus operaciones. La posibilidad de controlar la iluminación y generar un ambiente visual con niveles de luz adecuados en el espacio de trabajo, promueve la concentración, permite que los trabajadores se sientan más cómodos, que disfruten de mejor visibilidad para la realización de sus tareas y, por ende, de mejores niveles de seguridad en sus estaciones de trabajo.
De acuerdo con Rubén Urquijo, director de cuentas corporativas de Latinoamérica para Lutron Electronics, empresa líder mundial en el desarrollo y distribución de sistemas de control de la luz eléctrica y natural, “identificar el tipo de actividad que se realiza en los espacios laborales es fundamental para poder determinar la cantidad de luz necesaria para sentirse cómodo y realizar las tareas requeridas”.
En una oficina, por ejemplo, no se necesita la misma cantidad de luz que en un laboratorio o una sala de reuniones. Asimismo, los ambientes que dejan entrar la luz natural son ideales en muchos aspectos para el ahorro de energía, pero se debe tomar en cuenta que el exceso de este tipo de luz puede resultar molesto para las tareas diarias.
“Los sistemas de control de la iluminación automatizados pueden ayudar a realizar transiciones en los niveles de luz de las oficinas sin que los trabajadores lo noten, o tengan que ocuparse de hacerlo ellos mismos. Estos sistemas también ayudan a las empresas a ahorrar en el consumo de energía eléctrica”, explicó Urquijo.
La instalación de sistemas de apagado o atenuación automáticos de luz eléctrica contribuyen de modo importante a la reducción del consumo de energía eléctrica, incluso en situaciones cuando no hay trabajadores presentes en las oficinas, o en espacios donde las luces quedan prendidas pero no se utilizan todo el tiempo, como en las salas de conferencias o los baños. Los controles automáticos, por programación de reloj astronómico para apagar o atenuar fuentes de luz después del horario laboral, como el GrafikEye QS de Lutron Electronics, también representan una opción sencilla para el ahorro de energía en edificios comerciales.
Esto toma especial importancia si se toma en cuenta que la iluminación es responsable del 38% del total del consumo de energía en los edificios comerciales, y con un sistema integral de control de la energía, o combinando estrategias de iluminación, se puede obtener ahorros de hasta un 40%. Por ejemplo, el encendido y apagado automático de las luces, a través de sensores de presencia, puede generar ahorros de un 30% en las oficinas y de hasta un 50% en salas de juntas.
Una iluminación eficiente aumenta considerablemente el confort visual del trabajador y con ello una influencia comprobada en su productividad, su presencia y su seguridad en el trabajo.
Tomando en cuenta que una de las inversiones más altas de una empresa es en el área de recursos humanos; un incremento en la productividad, por más pequeño que este sea, puede transformarse en un factor importante para el éxito de sus operaciones. La posibilidad de controlar la iluminación y generar un ambiente visual con niveles de luz adecuados en el espacio de trabajo, promueve la concentración, permite que los trabajadores se sientan más cómodos, que disfruten de mejor visibilidad para la realización de sus tareas y, por ende, de mejores niveles de seguridad en sus estaciones de trabajo.
De acuerdo con Rubén Urquijo, director de cuentas corporativas de Latinoamérica para Lutron Electronics, empresa líder mundial en el desarrollo y distribución de sistemas de control de la luz eléctrica y natural, “identificar el tipo de actividad que se realiza en los espacios laborales es fundamental para poder determinar la cantidad de luz necesaria para sentirse cómodo y realizar las tareas requeridas”.
En una oficina, por ejemplo, no se necesita la misma cantidad de luz que en un laboratorio o una sala de reuniones. Asimismo, los ambientes que dejan entrar la luz natural son ideales en muchos aspectos para el ahorro de energía, pero se debe tomar en cuenta que el exceso de este tipo de luz puede resultar molesto para las tareas diarias.
“Los sistemas de control de la iluminación automatizados pueden ayudar a realizar transiciones en los niveles de luz de las oficinas sin que los trabajadores lo noten, o tengan que ocuparse de hacerlo ellos mismos. Estos sistemas también ayudan a las empresas a ahorrar en el consumo de energía eléctrica”, explicó Urquijo.
La instalación de sistemas de apagado o atenuación automáticos de luz eléctrica contribuyen de modo importante a la reducción del consumo de energía eléctrica, incluso en situaciones cuando no hay trabajadores presentes en las oficinas, o en espacios donde las luces quedan prendidas pero no se utilizan todo el tiempo, como en las salas de conferencias o los baños. Los controles automáticos, por programación de reloj astronómico para apagar o atenuar fuentes de luz después del horario laboral, como el GrafikEye QS de Lutron Electronics, también representan una opción sencilla para el ahorro de energía en edificios comerciales.
Esto toma especial importancia si se toma en cuenta que la iluminación es responsable del 38% del total del consumo de energía en los edificios comerciales, y con un sistema integral de control de la energía, o combinando estrategias de iluminación, se puede obtener ahorros de hasta un 40%. Por ejemplo, el encendido y apagado automático de las luces, a través de sensores de presencia, puede generar ahorros de un 30% en las oficinas y de hasta un 50% en salas de juntas.
Una iluminación eficiente aumenta considerablemente el confort visual del trabajador y con ello una influencia comprobada en su productividad, su presencia y su seguridad en el trabajo.
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