Atención

Si deja sus datos, podrá recibir en su correo un newsletter quincenal con más noticias de luminotecnia específicas y relevantes.
Además, podrán solicitar temas

viernes, 21 de abril de 2023

Congreso CdMx aprueba dictamen que busca controlar contaminación lumínica

 Fuente: https://www.milenio.com/estados/congreso-cdmx-aprueba-dictamen-controlar-contaminacion-luminica

Jesús Sesma celebró que la instancia legislativa haya aprobado el dictamen, que establece los criterios para controlar la luz en la Ley Ambiental de Protección a la Tierra de la Ciudad de México.


El Congreso de la Ciudad de México aprobó un dictamen que busca prevenir y controlar la contaminación lumínica, es decir, el exceso de flujo lumínico, iluminación o resplandor luminoso en ambientes nocturnos; o brillo producido por la difusión y reflexión de la luz en los gases, aerosoles y partículas en suspensión en la atmósfera, provenientes de fuentes artificiales.

El proponente de la iniciativa, Jesús Sesma, celebró que la instancia legislativa haya aprobado el dictamen, que establece los criterios para controlar la luz en la Ley Ambiental de Protección a la Tierra de la Ciudad de México, luego de que la capital del país se encuentra entre las ciudades con mayores emisiones de luz artificial en el mundo.

El legislador del Partido Verde (PVEM) expuso que la contaminación lumínica tiene intensidades, direcciones o rangos espectrales inadecuados para la realización de las actividades previstas en la zona alumbrada, que altera las condiciones naturales de luminosidad en horas nocturnas, provocando afectación a los patrones de descanso o condiciones de molestia en las personas sometidas al campo luminoso producido por las fuentes emisoras.

Agregó que, teniendo claro el concepto en la ley, se permitirá emprender acciones para minimizar la contaminación lumínica, al considerar cual sería la luminaria adecuada, la radiación espectral y el nivel de iluminación más apropiado para la ciudad y, con ello, se lograrían disminuir los efectos negativos a la salud y el medio ambiente, así como del gasto energético.

“La contaminación lumínica violenta el hábitat y la orientación biológica de los seres vivos, principalmente de fauna nocturna y migratoria, además de la perturbación astronómica debido al intenso resplandor luminoso. En adición, existe un desperdicio de recursos por el excedente de consumo de energía de los combustibles fósiles. Además, es un gran problema para la observación astronómica por la alta contaminación atmosférica”, lamentó.

Subrayó que el dictamen promueve la eficiencia energética en el alumbrado público; no alterar las condiciones naturales de las horas nocturnas en el suelo de conservación, áreas de valor ambiental y áreas naturales protegidas de la Ciudad de México; y prevenir, minimizar y controlar la contaminación lumínica impidiendo la intrusión lumínica.

“Aprobando el dictamen atendimos lo mandatado por la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, en materia de contaminación lumínica y la elevada concentración de luz en las ciudades, la cual se considera como una forma que afecta la salud de las personas,; resulta necesario que las autoridades de la Ciudad de México impulsen la prevención y control de este tipo de contaminación proveniente de fuentes fijas o móviles, por lo q estas reformas a la ley serán de gran utilidad”, concluyó.

sábado, 8 de abril de 2023

Los párpados dejan pasar mucha más luz de lo que se pensaba hasta ahora

 Fuente: https://www.eldebate.com/salud-y-bienestar/salud/20230408/parpados-dejan-pasar-mucha-mas-luz-pensaba_80992.html


Un científico de la Universidad Metropolitana de Osaka (Japón) ha demostrado que los párpados dejan pasar mucha más luz de lo que se pensaba.

La falta de sueño y los trastornos del sueño son perjudiciales para la salud e interfieren en la vida cotidiana. Se han realizado estudios para dilucidar los mecanismos subyacentes a diversos factores que afectan al sueño. Uno de los principales factores es el entorno lumínico. Se ha observado que los cambios en la exposición a la luz durante el día y la noche o durante el sueño influyen en los ritmos circadianos y en la calidad del sueño.

En la actualidad, los índices para describir el entorno de iluminación, como la iluminancia y la temperatura del color, se basan en las características visuales en condiciones de buena iluminación cuando los ojos están abiertos.

Sin embargo, dado que los ojos están cerrados mientras se duerme, comprender la transmitancia luminosa de los párpados y la luminosidad percibida con los ojos cerrados es esencial para describir adecuadamente el entorno de iluminación durante el sueño.

Aunque se han llevado a cabo varios estudios para medir la transmitancia de los párpados, las condiciones experimentales diferían considerablemente de los entornos de iluminación de la vida cotidiana: las evaluaciones se realizaban con una iluminancia extremadamente baja, por ejemplo, o con un solo ojo.

Este estudio, publicado en la revista científica Color Research and Application, ha aplicado un nuevo método para medir la transmitancia luminosa de los párpados con los ojos cerrados. Sus resultados indican que la percepción de la luminosidad con los ojos cerrados es notablemente superior a la registrada hasta ahora.

El líder del trabajo, Hideki Sakai, de la Escuela de Postgrado de Vida Humana y Ecología de la Universidad Metropolitana de Osaka, realizó experimentos con un total de 33 participantes en condiciones de relativa luminosidad (iluminancia de 100 lux) en las que se iluminó toda la cara de cada participante.

Se utilizó un dispositivo de iluminación para aumentar o disminuir la iluminancia facial, y se midió la transmitancia luminosa de los ojos cerrados, haciendo que los participantes hicieran ajustes para igualar los niveles de brillo que percibían con los ojos cerrados y con los ojos abiertos. Como fuentes de luz se utilizaron LED monocromáticos rojos, amarillos, verdes y azules y un LED blanco.

Los resultados del experimento muestran que los valores de transmitancia de los párpados eran hasta 10 veces superiores a los registrados hasta entonces (es decir, entre el 0,3 y el 14,5 %). El color de la luz también marcaba la diferencia: la luz roja se percibía como más brillante y la azul como más oscura.

Además, el profesor Sakai observó diferencias significativas entre los distintos participantes; para algunos, su percepción de la luminosidad permaneció casi invariable entre las condiciones de ojos abiertos y cerrados.

«Al comprender y utilizar adecuadamente el entorno de iluminación cuando los ojos están cerrados, espero avanzar en la investigación sobre la iluminación adecuada no sólo durante el sueño normal, sino también en otras situaciones, como las siestas o el transporte nocturno. Dado que los colores claros con baja transmitancia sólo se perciben como oscuros cuando las personas cierran los ojos, creo que este hallazgo podría ser útil para diseñar la iluminación en espacios con personas despiertas y dormidas, como los centros de evacuación», ha remachado el investigador.